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Fuentes de las partículas contaminantes en el aire

En la publicación Partículas contaminantes en el aire, clasificamos a las partículas contaminantes en finas y gruesas. En esta oportunidad, se comentan las fuentes de donde provienen algunas de las partículas que pueden encontrarse en el aire atmosférico.

Las partículas gruesas se originan por la desintegración de partículas de mayor tamaño; por ejemplo, partículas provenientes de la explotación de minerales. En general, muchas de las partículas grandes en el polvo atmosférico se originan del suelo o de la roca y su composición elemental tiene elevadas concentraciones de aluminio, calcio, silicio y oxígeno. Otro caso, puede ser la presencia de concentraciones elevadas de cloruro de sodio en zonas cercanas al mar. El polen emitido por las plantas, también puede considerarse como partículas sólidas, y llegan a tener un tamaño de entre 10 – 100 micrones. Un último ejemplo, de partículas gruesas es la ceniza de los volcanes.

Las partículas finas, por otra parte, se generan a partir de reacciones químicas y de la coagulación de otras especies más pequeñas, incluyendo moléculas en estado vapor. Es por ello, que el contenido de materia orgánica presente en las partículas finas es mayor que la cantidad presente en las partículas gruesas. Un ejemplo de este tipo de partículas es la combustión incompleta de combustibles a base de carbono (carbón, petróleo, gasolina y diesel), que genera muchas partículas pequeñas de hollín (compuestas principalmente por cristales de carbono). En la última década, estas emisiones, provenientes de las emisiones de autos y camiones a base de diesel, han empezado a controlarse utilizando convertidores catalíticos (combinación de modificaciones en el motor y en el uso de trampas de agua). Otro tipo de partículas finas que pueden encontrarse en el aire están compuestas por compuestos inorgánicos de azufre y nitrógeno. Las especies de azufre se originan a partir del dióxido de azufre provenientes de fuentes naturales (volcanes) y por la polución (centrales de energía y de fundiciones); mientras que las especies de nitrógeno se generan por la oxidación de compuestos atmosféricos que contienen nitrógeno.

Básicamente entonces, las partículas gruesas provienen del hollín y de partículas inorgánicas (de composición similar al suelo); mientras que las finas provienen del hollín o aerosoles de sulfato y nitrato. Las partículas finas son, además, usualmente ácidas debido a la presencia de ácidos no neutralizados; mientras que las gruesas son generalmente básicas debido al componente del suelo.