En las industrias de procesos suele necesitarse llevar adelante intercambios de calor para calentar o enfriar alguna corriente del proceso o bien modificar su estado físico mediante evaporación o condensación. Para que este intercambio sea efectivo, es necesario que una corriente esté en condiciones de ceder calor y la otra, de recibir calor. Generalmente, estos intercambios de calor entre fluidos se llevan adelante en equipos conocidos como Intercambiadores de Calor.
Las corrientes que participan en una planta química puede clasificarse como:
*Corrientes de procesos: aquellas que participan en el balance de masa de la planta y pueden consistir en reactivos, productos de reacción, fracciones derivadas de procesos de separación, efluentes, entre otros.
*Corrientes de servicios: aquellas que no participan del balance de masa de la planta, dado que no se mezclan con las corrientes de proceso; pero pueden afectar los balances de energía. Puede ser por ejemplo, el vapor utilizado para calefacción de procesos y el agua de enfriamiento de los circuitos de refrigeración industrial.
Las corrientes que se ponen en contacto en un intercambiador de calor pueden ser corrientes de proceso o de servicios. Por ejemplo, cuando existe una corriente de proceso que debe ser calentada y otra que debe ser enfriada, suelen ponerse en contacto como una forma de economizar energía. Si no existe la posibilidad de combinar corrientes de esta manera se recurren a las corrientes de servicios.
Debe tenerse en cuenta que generalmente, se habla de intercambiadores de calor cuando no hay cambios de fases involucrados. Cuando se generan condensaciones o evaporaciones los equipos se llaman condensadores y evaporadores o caldera.