Nueva edición de Profesionales del Futuro, en donde hablaremos sobre los oficios por vocación, y en este caso de una muy particular: ser astronauta.
Primero tenemos que saber ¿qué es la vocación?, bueno la vocación es una inclinación hacia una carrera o profesión; podríamos decir que es algo que nace con nosotros, que es nato, que tenemos ciertas facilidades o tendencias para realizar algún trabajo o dedicarnos a determinada profesión. Cabe destacar que la vocación es un proceso que se va dando durante toda la vida, ya que se va construyendo permanentemente; implica mucho de autoconocimiento ya que tenemos que saber: quien soy, como soy, hacia donde quiero ir, que me gusta, en que soy bueno, entre otras cosas.
Lo segundo que se relaciona es la profesión o carrera que hoy estamos tratando: la de astronauta. Sin dudas esta es una de las carreras más míticas e imponentes que existen, ya que solemos pensar y tener muchos interrogantes acerca de esta y de quienes la practican.
El término astronauta hace referencia a toda aquella persona que tripula un objeto espacial o incluso a la tripulación de una nave espacial; es decir a viajeros espaciales. ¿Cómo se llega a ser astronauta? En un comienzo la NASA en 1959 acudía al ejército americano para que le proporciones a candidatos para astronautas, ya que por ese entonces no había mucha experiencia ni precedentes. Era bastante compleja la selección de aquellos hombres aptos para ir al espacio y se tenían en cuenta algunas características para serlo como: muy buena salud, aptitud física y psicológica, de contextura física más bien pequeña para que pueda entrar en las cabinas espaciales de aquella época.
Ya con el tiempo y la experiencia ganada la NASA ha cambiado algunos requisitos como bajar la edad a unos 35 años, no tener como condición pertenecer al ejército o no tener pequeña contextura física, además otra novedad es quelas mujeres también pueden participar. El programa de adiestramiento sin embargo sigue siendo muy duro, y a pesar que obtener el título, los astronautas deben seguir estudiando materias como meteorología, física, computación, navegación espacial o astronomía, por solo nombrar algunas; desde ya que lo más duro es el entrenamiento físico.
Acá podemos observar que ser astronauta hoy en día es algo muy complejo, y que se requieren muchos estudios y entrenamiento para llegar a ser uno, y si nos preguntamos ¿cómo serán los astronautas del futuro? Básicamente hay dos opciones, la primera es que los enteramientos sigan siendo tan estrictos como hasta ahora y que el estudio siga siendo algo fundamental para convertirse en viajero espacial. Pero si dejamos volar nuestra imaginación también podemos pensar que puede haber astronautas por vocación, es decir que no tengan que pasar por todos estos estudios para ser uno.
¿Cómo sería ser un astronauta por vocación? Bueno puede ser que estos sean hijos o nietos de astronautas y por ende han adquirido conocimientos a través de estos, o que ¿Por qué no? Sean personas nacidas en el espacio, que por el solo hecho de nacer aquí ya tengan conocimientos natos en lo que a esto se refiere.
En fin, veremos dentro de unos años que requisitos hay para ser un buen astronauta, y si existirán los astronautas por vocación.
Vía: Astronomía