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Recomendaciones para los Diabéticos tipo II

Nutrición adecuada y ejercicio aeróbico regular

La Diabetes Tipo II es una enfermedad altamente prevalente en la población general y acarrea severas consecuencias a la salud si ni es abordada y tratada correctamente. Para más información sobre la fisiopatogenia, factores de riesgo y manifestaciones de este tipo de Diabetes les recomiendo leer la nota Nociones generales sobre Diabetes Mellitus, ya que en este artículo en particular haremos referencia a aquellas cosas que debería tener en cuenta un diabético Tipo II para mejorar el control de su enfermedad y optimizar así su calidad de vida.

Los 3 pilares fundamentales del tratamiento correcto de la Diabetes Tipo II son: actividad física, nutrición adecuada y fármacos. Estos último no siempre son requeridos y en un principio la glucemia (valores de glucosa en sangre) pueden controlarse sólo con dieta y actividad física.

La alimentación adecuada ha demostrado reducir los niveles de insulinorresistencia y disminuir los niveles de Hemoglobina Glicosilada (un valor de laboratorio importantísimo para evaluar el cumplimiento de la terapéutica en el Diabético y el fallo en la respuesta al tratamiento). La dieta debe estar basada en un 65% de Hidratos de Carbono, igual que en una persona no Diabética, procurando no consumir azúcar ni miel. También es importante evitar las grasas, ingerirlas en un 30% del total de macronutrientes de la dieta. Recuerden que la Diabetes Tipo II la mayoría de las veces se asocia a dislipemias y sobrepeso u obesidad.

Con respecto a la actividad física, esta debe ser aeróbica y está recomendado hacer 30 minutos por día como mínimo. Se ha probado que el ejercicio aeróbico regular aumenta la actividad de la insulina y aumenta la cantidad de receptores Glut de glucosa a nivel del músculo esquelético, lo que se traduce en una mayor captación de glucosa por los tejidos periféricos y valores más bajos de glucosa en sangre.

Por supuesto que no todos los Diabéticos II logran controlar su enfermedad con sólo 2 de los 3 pilares. Muchos necesitan hipoglucemiantes orales. Los más eficaces son la Metformina, única droga que a demostrado a través de ensayos clínicos controlados, la disminución de las complicaciones micro y macrovasculares en pacientes obesos. La glibenclamida es una droga también muy efectiva aunque no ha demostrado la disminución de la macroangiopatía pero si de la microangiopatía. Por último si con hipóglucemiantes orales los valores de glucemia siguen siendo altos, sería necesario la adición de insulina al tratamiento.