Como sabemos hoy en día la tecnología avanza a pasos agigantados, y la misma repercute en la manera de trabajar de algunas carreras, como es el caso de la arqueo y antropología, donde estas herramientas van de la mano con la pala, la brújula y demás.
De este modo Marcelo Weissel que es Licenciado en Ciencias Antropológicas de la UBA, afirma que para su especialidad que es la arqueología urbana, histórica e industrial, además de las herramientas habituales con las cuales se trabaja, incorporó las computadoras, las cámaras digitales y georradares, que hacen una especia de ecografía del suelo. Marcelo afirma en una entrevista:
«las computadoras y cámaras digitales son herramientas básicas que utilizo diariamente y las que me permitieron reconstruir, por ejemplo, la transformación ambiental de los barrios de La Boca y Barracas, encontrando muchos objetos y testimonios de la época colonial que dejaron los inmigrantes europeos debajo de los conventillos»,
Hoy en día muchos antropólogos suman a sus elementos de trabajos muchos softwares y aplicaciones, entre los que se destacan: programa de cálculo antropométrico, sistema de historia clínica pediátrica, sistema de recordatorios alimentarios de 24 horas, Sistemas de Información Geográfica, paquetes de análisis estadístico y modelos de simulación.
Para muchos antropólogos la utilización de estos programas han cambiando el modo de trabajar y vivir la profesión, ya que permiten analizar y descubrir datos que de la manera tradicional llevaría mucho tiempo y dinero; debemos recordar que hay muchos programas que son de descarga gratuita por lo cual no conlleva ningún costo.
Entre las tecnologías más usadas están:
-Computadoras
-Cámaras fotográficas
-Análisis estadístico
-GPS
-Grabadores digitales para grabar las entrevistas
A la hora de nombrar las carencias muchos sostienen que aun no hay alguna base de datos bien desarrollada que permita agrupar las investigaciones antropológicas argentinas, en relación a esto el antropólogo Diego Diaz Córdova afirma:
«No es sencillo ubicar los trabajos de los colegas y en muchos casos esa información no se encuentra digitalizada»,
Para concluir debemos afirmar que el modo de trabajar y ver el campo antropológico ha cambiando, y muchos de esos cambios se dieron gracias a las nuevas tecnologías, las cuales han permitido realizar y descubrir datos antes impensados.
Vía: La Nación