Todas las personas tenemos historias de vida que contar, que relatar y hacerle llegar al otro. ¿Cuál es la tuya? A lo largo de estas líneas te estaremos brindando una serie de consejos para escribir una autobiografía, siendo fantástico que puedas tratarla como una buena historia. Para ello, deberá haber un protagonista, un conflicto central y una variedad de personajes que, claro está, son los que ayudan a que la misma resulte fascinante. Veamos cómo proceder.
Cómo escribir una autobiografía
En principio, deberás establecer una cronología de tu propia vida. Comenzarás el relato con una investigación sobre tu vida, siendo la elaboración de una línea de tiempo la mejor forma de incluir todos los sucesos más relevantes por los que has pasado.
Ten en cuenta que no es necesario comenzar contando cuándo naciste. También debes considera información de tus ancestros, la vida de tus abuelos, de tus papás; la historia familiar puede llevarte a generar una autobiografía realmente excelente.
Recuerda hechos y sucesos cruciales de tu adolescencia que puedan haberte llevado a tomar decisiones rotundas; cuenta dónde has estudiado, qué has hecho durante ese tiempo; no olvides incluir detalles sobre tus relaciones, tus estudios y cualquier otro hecho importante que haya cambiado tu vida.
Como toda buena historia, la tuya debe también poseer personajes interesantes, amigos y enemigos que te ayuden al desarrollo de la misma. En teoría, nuestros padres marcan una parte grandísima de lo que somos en la actualidad, por lo que no debes olvidarte de ellos a la hora de escribir tu autobiografía. Pero piensa también más allá de ellos, de tu familia inmediata; incluye personas que hayan influido en tu vida y se merezcan un papel en tu relato.
Ten cuidado con las anécdotas que vayas a incluir; deberás analizarlas muy bien, ya que hablarán de vos y te describirán de pies a cabeza. Lo mejor sería comenzar con un borrador, relatar las historias y hechos principales, y cuando estés seguro de ellos, será momento de pasarla en limpio.
¡Importantísimo! Redactar en primera persona, ya que quien se tope con la historia estará leyendo algo que te represente. Por lo tanto, deberás ser auténtico y mostrar algo de tu personalidad en lo escrito. Anímate a escribir como si le abrieras el corazón a un amigo de confianza, sin tanto palabrerío que pueda dificultar la comprensión de lo plasmado.