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Datos curiosos relacionados con la disminución del ozono atmosférico

La reducción de la concentración de ozono estratosférico permite la penetración de más luz UV-B hacia la superficie de la tierra, dando lugar a graves consecuencias para ciertas formas de vida, incluidos nosotros mismos. La exposición a la luz UV-B causa bronceado de piel y quemaduras; una exposición excesiva puede originar cáncer de piel. Además el sistema inmune del hombre y el crecimiento de algunas plantas y animales puede quedar afectado negativamente.

La mayor parte de los efectos biológicos de la luz solar ocurren debido a que la luz UV-B puede ser absorbida por las moléculas de ADN. La mayor parte de los cánceres de piel son debidos al exceso de exposición a la fracción UV-B de la luz solar, de tal manera que es de esperar que cualquier disminución de ozono origine, en último término, un aumento en la incidencia de esta enfermedad. De todos modos, la mayor parte de los cánceres de piel no son malignos y pueden tratarse con considerable éxito.

El uso de cremas solares que bloquean la radiación UV-B, pero no la UV-A, pueden dar lugar a un aumento de cáncer de piel debido a que estas cremas permiten a las personas que las usan exponerse durante largos períodos prolongados sin quemarnos. Los compuestos químicos utilizados en lociones solares reflejan o absorben la luz solar (óxido de cinc, óxido de titanio) o absorben la componente UV antes de que alcance la piel.

La parte frontal del ojo es una zona por donde la luz ultravioleta puede penetrar en el cuerpo humano. Sin embargo, la córnea y el cristalino filtran cerca de un 99% de la fracción UV de la luz antes de alcanzar la retina. Por el contrario, la fracción UV-B absorbida por la córnea y el cristalino produce compuestos reactivos que atacan las moléculas estructurales, pudiendo generar cataratas.

Otra consecuencia de la disminución del ozono atmosférico, es que se cree que el aumento de la cantidad de rayos UV-B incidentes interfieren en el fenómeno de fotosíntesis, con lo que las plantas responderán con una menor producción de hojas, semillas y frutos. Todos los organismos que viven en alrededor de los primeros cinco metros por debajo de la superficie de los reservorios de agua limpia también experimentarán el aumento de la exposición al UV-B, con lo que estarán en riesgo. Se teme que la producción de fitoplancton, cerca de la superficie del agua marina pueda estar en riesgo significativo debido al aumento de UV-B; ello podría afectar a la cadena trófica marina de la cual el fitoplancton constituye la base. Ciertos experimentos indican que hay una interrelación compleja entre la producción de la planta y la intensidad UV-B, ya que ésta última también afecta a la supervivencia de insectos que se alimentan de las plantas.

Por último, se ha observado una disminución mundial de la población de anfibios, debido a la mortalidad de sus huevos a causa del aumento de UV, además de la destrucción del hábitat que conlleva.