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Día del voto femenino

Hoy conmemoramos el día del voto femenino, ya que un 23 de septiembre pero de 1947, durante el gobierno de Perón se promulga la ley número 13.010 que instituye formalmente el voto de la mujer.

Aunque hoy quizás no resulte raro, antes la mujer no podía ejercer el derecho al voto, y esta lucha que se remonta desde finales del siglo XIX, pero que culmina con la campaña de Eva Perón, provoca que por primera vez en la historia de nuestro país las mujeres pudieran votar y elegir a sus gobernantes.

En nuestro país las primeras mujeres que se preocuparon y ocuparon del tema, tanto del sufragio femenino como de la participación en política, fueron las militantes de los partidos anarquistas y socialistas; estas luchaban por que la igualdad fuera un hecho, al igual que las oportunidades. Siguiendo modelos europeos fundan entre 1900 y 1910 algunas agrupaciones que tenían como finalidad defender los derechos cívicos de la mujer, y estas acciones generaron que otras mujeres se sumaran a  la lucha.

El rol de la mujer estaba cambiando, ya la misma quería ser independiente del hombre y tener voz y voto propio, recordando siempre que ellas como sujetos habitantes de una nación también tenían derecho a votar y a participar en ámbitos políticos. ¿Qué decía la ley por ese entonces? Pues que mientras la mujer era soltera dependía de su padre, y cuando se casaba pasaba a depender de su esposo, sin posibilidad de participación, quedando por fuera de la vida como ciudadanas.

A principios del siglo XX forman la Unión y Labor para el progreso femenino y la protección del niño, también la Asociación Universitarias Argentinas en 1902 y tres años después, el Centro feminista de Buenos Aires y la Liga de mujeres librepensadoras.  Todas, con una misma finalidad: lograr más igualdad de derechos entre hombres y mujeres.

De a poco otras agrupaciones fueron surgiendo en apoyo, pero pese a los grandes logros la mujer a mitad del siglo XX seguía privada a ejercer su voto. Pero el golpe de estado que derroco a Yrigoyen en 1930 cambio un poco el panorama, y dificulto que los reclamos femeninos continuaran con los mismos impulsos.

Pese a esto los partidos políticos comienzan a recibir mujeres que estaban dispuestas a seguir luchando; en 1933 se crea la Asociación de mujeres radicales, y en 1946 la secretaría Femenina del Partido Laborista y de Femenina de la UCR, formándose por último la rama femenina en el Justicialismo.

La lucha debía continuar, y nuestro país se estaba quedando en concepciones sociales ridículas y antiguas, ya que en muchos lugares del mundo las mujeres ya podían votar. Finalmente durante 1947, y de la mano de Eva Perón quien fue su promotora, en septiembre de 1947 las mujeres por primera vez pudieron votar.

Vía: Suteba