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El siglo Prodigioso – Breve crónica de 100 años decisivos (XLIX)

Avanzamos un poco más con el artículo “El siglo prodigioso” publicado en la revista Nuestra de Olavarría en 1999. Se trata en esta oportunidad el año 1964.

1964.

*Cassius Clay gana el título mundial en boxeo de peso completo.

*El líder anti-apartheid sudafricano Nelson Mandela es condenado a cadena perpetua. En 1961, Mandela fue condenado a 27 años de cárcel en el Juicio de Rivonia. En 1964 lo encarcelaron en la isla Robben, durante 17 años en precarias condiciones. Posteriormente pasaría otros 10 años más en otras dos prisiones diferentes. El gobierno de Sudáfrica rechazó todas las peticiones de que fuera puesto en libertas. Mandela se convirtió en un símbolo de la lucha contra el apartheid dentro y fuera del país, una figura legendaria que representaba la falta de libertad de todos los hombres negros sudafricanos. A continuación trascribo parte del discurso de Mandela que dio el día del Juicio: “He soñado con la idea de una democracia y una sociedad libre en la cual las personas vivan juntas en harmonía y con igualdad de oportunidades. Es un ideal el cual quiero vivir para verlo hecho realidad. Pero si para ello es necesario es un ideal por el cual estoy preparado a morir”.

*Philips inicia la comercialización de los cassettes. El Audiocasete Compacto es un medio para el almacenaje de audio que fui introducido en Europa por la empresa Philips en 1963, y en los EEUU en 1964; bajo marca registrada con el nombre de Compact Cassette. Aunque había otros sistemas de cartucho de cinta magnética en ese entonces, el Casete Compacto llegó a ser dominante como resultado de la decisión de Philips de licencia el formato gratuitamente. Se convirtió entonces en una alternativa popular y re-grabable al disco de vinilo durante los años 70. La producción en masa de Audio Casetes Compactos comnzo en 1964 en Hannover, Alemania.

*Perón intenta regresar, pero es detenido en Brasil y debe volver a España. El 2 de diciembre, en horas de la madrugada, el general y sus acompañantes se embarcaron en el vuelo 991 de la compañía Iberia, con destino a Buenos aires. Perón debió ingresar a bordo a escondidas, evitando la atenta vigilancia de la policía española. Se trataba, no obstante, de un vuelo regular y el ex presidente tenía su documentación en regla: teóricamente -y teniendo en cuenta las declaraciones del gobierno argentino-, nada debía impedir su regreso. Sin embargo, no sería así. «Al arribo de la mencionada aeronave a Río de Janeiro -relata Perón- se produjo un insólito espectáculo: el avión fue literalmente rodeado por la tropa armada e inmovilizado en el aeropuerto internacional del Galeao, en tanto un grupo de militares subía al avión intimidando a su personal y declarando detenida la aeronave, con la ameneza de conducirla a la base militar inmediata. Acto seguido llegaba un representante del ministerio de Relaciones Exteriores brasileños, quien comunicó al comandante que no podía continuar el viaje si antes no le entregaba a los viajeros que constituían el grupo del general Perón.

El funcionario no haría lugar a la protesta: los viajeros estaban bajo jurisdicción militar y no les quedaba sino allanarse y cumplir con lo que se les ordenaba. Perón no puede continuar viaje y debe regresar a España.

*Se detectan focos guerrilleros en Salta y comienza a actuar el grupo Tacuara.

Hasta acá llegamos hoy. Continuaremos en el próximo artículo con más del “Siglo Prodigioso”.