Ernesto Che Guevara nació el 14 de mayo de 1928 en Rosario, Argentina, y se doctoró en medicina en Buenos Aires. Durante sus estudios realizó largos viajes por Latinoamérica, visitando países como Costa Rica, Ecuador, Guatemala, México y Perú. Ahí pudo conocer la precaria situación de la población y la miseria en que vivía.
Para escapar del servicio Militar, en el año 1953, dejó su país, y se instaló en Bolivia, donde entro en contacto con revolucionarios cubanos que le informaron de su fracasado golpe de estado en la isla caribeña. Durante su estadía en Guatemala, y más tarde en México se produjo la definitiva conversión del Che al marxismo revolucionario.
En México conoció a Fidel Castro, con quien compartía similares puntos de vista,y se unió a su grupo revolucionario que estaba preparando un nuevo intento golpista en Cuba. En 1956 Castro desemboco en Cuba con un grupo de guerrilleros con la intención de derrocar al dictador Fulgencio Batista y Zaldivar. Tras ser rechazados se refugiaron en la zona montañosa de sierra maestra donde organizaron un efectivo ejército, que en 1958 contaba con más de diez mil hombres. El día de fin de año de 1958, batista se vio obligado a huir y los revolucionarios entraron en la capital La Habana.
En febrero de 1959, una ley constitucional concedió la nacionalidad cubana, y a su nombre se le añadió el apodo del che.
Entre 1966 y 1967 organizó una guerrilla en Bolivia; no obstante no consiguió que el partido comunista boliviano lo apoyara, y sobrevaloro el potencial revolucionario de la población. El 7 de octubre de 1967, Guevara cayó en manos de las tropas bolivianas y fue fusilado.
El Che Guevara se convirtió en un símbolo de la lucha contra las dictaduras en todo el mundo, y su muerte convirtió al líder en una mártir de la lucha contra el imperialismo mundial y un mito para los jóvenes revolucionarios. En 1997, el cadáver de Guevara fue trasladado a Cuba.