Cotidianamente hablamos de la piel y sus cuidados, y para ello es muy importante saber que la epidermis está constituida, aproximadamente, por un 90% de células epidérmicas -queratinocitos-, teniendo además células de Langerhans -del sistema inmune-, melanocitos -propios del sistema pigmentario- y células de Merkel -características del sistema nervioso-. Nuestro objetivo, a lo largo de esta nota, es contarte cuáles son los estratos córneos de la piel, tratándose de las cinco capas más importantes que recubren nuestro cuerpo.
Empezamos diciendo que la piel se constituye por tres capas superpuestas: epidermis, dermis e hipodermis. La primera es la exterior y visible, formada principalmente por queratinocitos -células muertas-. En su interior se forman, de un modo regular, dichas células que después de un tiempo logran llegar a la superficie. Finalmente se desprenden de la piel como escamas muertas.
Tipos de capas de la piel
Pensando a la epidermis como epitelio de superficie, es plano poliestratificado queratinizado, formado por cinco estratos que comprenden, a su vez, nuevas capas de célula.
El nombre y el orden, desde el interior hacia la superficie, de los estratos córneos es el siguiente:
ESTRATO BASAL. En ciertas ocasiones se lo llama estrato germinativo. Se trata de una monocapa de células cilíndricas, siendo las únicas capaces de lograr la mitosis. A medida que se van generando nuevas células, las originarias emigran o se desplazan a las capas más superficiales de la epidermis hasta lograr desprenderse en la superficie cutánea.
ESTRATO ESPINOSO. Esta constituida por un total de 8 a 10 capas de células con forma irregular y puentes intercelulares muy destacados, las cuales son ricas en ADN.
Ante enfermedades cutáneas, esta capa es capaz de retener el agua, dando lugar a la formación de ampollas en la piel.
ESTRATO GRANULOSO. Las células de esta capa se encuentran rellenas por una sustancia llamada queratohialina, sumamente necesaria para la producción de queratina. Son células que se han empezado a degenerar.
Es en esta capa de células granulares donde se inicia el proceso de queratinización.
ESTRATO LÚCIDO. Esta capa recibe también el nombre de capa transparente; se ubica sólo en las partes más gruesas de la epidermis, como las maños y las puntas de los pies. Es muy delgada y rica en lipoproteínas, cuya función principal es el impedimento de la entrada y salida de agua.
ESTRATO CÓRNEO. Se trata de la capa más superficial de la epidermis, formada por células escamosas muertas, planas y delgadas, las cuales se desprenden continuamente dando lugar a otras.