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Generadores de vapor

El vapor se genera en equipos denominados calderas, que aprovechan el calor liberado por la combustión para evaporar el agua a través de superficies metálicas.

El diseño de una caldera, está ligado principalmente a tres parámetros: capacidad de evaporación, presión y temperatura de vapor y tipo de combustible.

Existen fundamentalmente dos tipos de calderas:

*Pitorubulares: Se utilizan para bajas presiones (hasta 18 – 20 atmósferas). Permiten el manejo de grandes volúmenes de agua. Los gases circulan por el interior de los tubos y el agua los rodea. Resisten bien las variaciones bruscas de la demanda, con poca variación de la presión. Son menos exigentes respecto a la calidad del agua.

*Acuotubulares: Se utilizan para altas presiones (superiores a 20 atmósferas). En estas calderas el agua circula por los tubos y los gases calientes de la combustión lo hacen alrededor de ellos. El diámetro de los tubos es más pequeño (soporto mayores presiones). Tienen mayor superficie de caldeo (mayor cantidad de tubos, mayor superficie externa) y capacidad (mayor cantidad de tubos). En las instalaciones medianas o grandes se usan casi con exclusividad. Son absolutamente seguras, pero son más exigentes respecto de la calidad del agua y responde a las variaciones bruscas de la demanda con cierta pesadez.

La gran mayoría de las calderas trabaja con circulación natural, debido a que cuando comienza la producción del vapor inicia su movimiento ascensional. La circulación forzada con bombas se utiliza con presiones mayores a 150 atmósferas debido a que a grandes presiones aumenta la densidad del vapor y disminuye la del agua.