Últimamente oímos hablar mucho sobre él o lo vemos en los medios, hablamos de Ignacio Guido Montoya Carlotto, y es el nieto recuperado de Estela de Carlotto, una de las Abuelas íconos de Plaza de Mayo.
El mismo nació en Olavarría, y sus padres adoptivos le dieron el nombre de Ignacio. A pesar de haber sido criado en el campo, sin contactos directos con el arte, su pasión por la música se despertó desde muy temprano, algo que sin dudas siempre le había parecido extraño a este, ya que podríamos decir que no había una conexión entre su crianza y forma de vida, con lo que a él le gustaba y sus pasiones.
Ignacio Guido al finalizar sus estudios secundarios decidió continuar con su formación musical, estudio en el IMMA (Instituto Municipal de música de Avellaneda) y también en el Conservatorio de Olavarría “Ernesto Mogávero”. De a poco y gracias a su talento y esfuerzo fue ganándose un reconocido lugar entre los músicos olavarrienses, e incluso ocupa actualmente el cargo de Director de la Escuela de Música “Hermanos Rossi”.
Si bien se podría decir que su fuerte es el jazz, también incursiona en otros campos musicales como el folclore o rock por ejemplo, haciendo de Ignacio un músico abierto y versátil.
En lo que va de su carrera produjo 3 discos: “Mujeres argentinas x hombres argentinos”, “Musa Rea” y “Open Dreams”. Su trayectoria artística es extensa e importante a pesar de su corta edad, incluso había participado muchas veces en jornadas por la memoria o la identidad, en relación a los desaparecidos en la última dictadura militar del país.
Entre algunos músicos reconocidos con quien compartió escenario se encuentran Liliana Herrero, Adrián Abonizio, Sergio Verdinelli, entre otros.
Los primeros días de agosto un examen de ADN confirmó que Ignacio era el nieto que Estela tanto había buscado, de ese modo, Pacho (como lo apodan sus amigos), pasó a estar en boca de todos los medios y noticias, los cuales continuamente aun siguen su agenda.