Hoy es un nuevo día en donde abordamos temas abocados a la educación, en esta oportunidad no podemos no hablar sobre un tema que nos preocupa a todos los argentinos: las inundaciones acontecidas en La Plata y algunos sectores de Buenos Aires. Ante esto es imposible no preguntarnos ¿Cómo es la educación en tiempo de inundaciones?
Con familias devastadas, casas, calles y escuelas inundadas quizás la primera pregunta que surge es ¿cómo empezar? O mejor dicho ¿cómo continuar?. En el plano educativo las preguntas son similares, a la cual podríamos sumarle ¿Qué rol debe cumplir la escuela en tiempos como este?
Muchas escuelas se enfrentaron con el problema ya sea edilicios –propio de las inundaciones-, como así también emocional y psicológico de tanto maestras como alumnos que perdieron poco, bastante o todo lo que tenían. Sin dudas frente a esta situación y en estos casos la escuela debe actuar como un espacio de contención y de educación.
Cuando refiero a espacio de contención hablo sobre que la labor de docentes, asistentes sociales, psicólogos y médicos debe ser fundamental; estos deben involucrarse mas que nunca con la comunidad educativa y ayudar desde su profesionalismos a aquellos que lo están necesitando. Contenerlos, aliviarlos, escucharlos, pueden ser tareas fundamentales y pilares para sanar de a poco las heridas y entender el ¿Por qué?
En cuanto a espacio educacional, no solo se deberían aplicar en este caso cuestiones curriculares, sino que debe usarse este espacio para educar sobre aspectos como: salud, limpieza, aspectos comunitarios y de solidaridad, entre otros.
Contener, dar esperanzar y educación debe ser el rol de los educativos y afines. Debemos tener en cuenta que según los últimos informes solo el 40% de los alumnos de La Plata pudieron regresar a clases y a su vez dirigentes de Suteba informaron que la mitad de los docentes tampoco pudieron retomar sus clases, pero que no obstante están haciendo tareas de campo donde relevan porque ese niño no volvió a la escuela.
A su vez otro tema preocupante es la situación edilicia de las escuelas, ya que el 70% de las mismas están con un gran deterioro, habiendo además 30 escuelas que quedaron seriamente dañas y 5 que no funcionan debido a los daños.
Otra vez queda pedir acción para los funcionarios, que las escuelas se reparen, que los damnificados tengan la ayuda suficiente y bien gestionada; asimismo desde la escuela no se debe perder el objetivo de ayudar, contener y educar hasta que todo vaya mejorando.
Vía: TN