Mañana se cumplen 45 años de uno de los mayores logros que tienen para alardear los norteaméricanos: la llegada del hombre a la luna. Símbolo principal de la supuesta supremacía de EEUU sobre la Unión Soviética, desde que Neil Armstrong dio su «paso» sobre nuestro satélite hasta hoy, han salido a la luz infinidades de conspiraciones, desmentiras y teorías extrañas sobre este suceso caso. Como el cinéfilo que soy, hay una teoría que me resulta demasiado interesante como para no dedicarle el NeetAnálisis del día de hoy: la de Stanley Kubrick (el famoso director) y su remordimiento.
¿Por qué remordimiento? Hagamos un poco de historia. Justo un año antes de la llegada del hombre a la Luna, Kubrick lanzó su famosísima película «2001: A Space Odyssey (1968)» que, como el título lo dice, es un film de ciencia ficción que trataba principalmente sobre viajes por el espacio (muchos me van a querer matar por este ultra-resumen que hice, sepan entender). Entre las sinfines de escenografías presentes en la película, la Luna no podía faltar. La cuestión es que se sospecha que se utilizaron estos mismos escenarios para recrear la llegada de los astronautas al satélite, y que dicho arribo fue dirigido ni más ni menos que por Stanley Kubrick. El director fue obligado a ocultar este hecho a su familia y así se vio obligado a llevar esa horrenda carga sobre su espalda hasta el fin de sus días.
Una de las principales «pruebas» que sustentan esta teoría es ni más ni menos que una de sus más famosas obras fílmicas: «El Resplandor (The Shining, 1980)», película basada en la novela con el mismo nombre escrita por Stephen King. Esta película fue altamente criticada por los fanáticos de libro (de hecho, S. King mismo es el que más la odia) por los sinfines de cambios que el director implementó en el guión con respecto a la obra. Ahora, ¿puede ser que todos esos cambios hayan sido colocados a propósito, para dar un mensaje más profundo? Tranquilamente, dada la naturaleza de Kubrick. El teórico conspirativo Jay Weidner afirma que el director rodó «El Resplandor» para reconocer lo que hizo y para pedir perdón por la tremenda farsa que había montado. Nos referimos, claramente, al arribo del Apolo 11 a la Luna.
Las pruebas (algunas muchas más locas que otras), están enumeradas y muy bien explicadas en esta nota (en inglés), pero aquí les dejamos un pequeño resumen. Si viste la película, enseguida estos detalles te llamarán la atención. Si no la viste, te recomiendo que la veas, que el film no tiene desperdicio.
- El hotel mismo, grande, lujoso y que ha albergado a sinfines de personas de la élite, representa a EEUU.
- La habitación en la que Danny intenta entrar es la 237. En la novela este número era el 217. ¿Error garrafal? Weidner nos recuerda que la distancia entre la Tierra y la Luna es de 237.000 millas.
- Alrededor del hotel hay sinfines de Osos marrones que rodean al edificio. Estos Osos son Osos Rusos, símbolo de la Unión Soviética.
- Jack no permite que su esposa lea la novela que está escribiendo, así como Kubrick no permitía que su esposa se enterara sobre el proyecto en el cuál estaba participando por aquél entonces.
- Por último, y para mí la prueba más impactante, es la escena previa a la que Danny entra a la prohibida habitación 237. Miren el siguiente video y presten atención a su pulóver:
Para no hacerlo más extenso, lo terminamos aquí. Repito, para saber más recomiendo leer la nota escrita por Weidner para poder sacar conclusiones propias.
Si esta teoría no te interesó un comino, te recomiendo pasar por los diversos blogs de Neet que seguro vas a encontrar una nota sobre la llegada del hombre a la Luna de tu agrado.
Vía