¿Hay alguna fuerza motriz tan lucrativa y que tantas montañas mueve como la nostalgia? ¿El amor? No, claramente es la nostalgia y el amor por el pasado, que siempre parece ser mejor que el presente. Si no fuese así, entonces los de Hollywood se estarían rebanando los cesos realizando películas originales y no estaríamos en esta ola GIGANTE de remakes, reboots, secuelas y precuelas en donde lo único que importa es la platita. ¿Y, quién tiene, tal vez, un pasado más dulce que nuestros amigos de Disney? Con títulos gigantes como Aladdin, La Bella Durmiente, la Cenicienta, Blancanieves, Dumbo, Bambi, El Rey León, etc… Disney se catapultó hacia lo más alto y nadie pudo sacarlo de allí.
Ahora, con esta nueva onda de los reboots y adaptaciones con mejores efectos especiales, Disney no se quedó atrás y empezó a ceder derechos para que abusen de sus títulos tanto como quieran siempre y cuando la plata les llegue a ellos. Por eso, tuvimos una gran cantidad de oleadas de películas de este género arrancando con la remake con efectos especiales flasheros de Alicia en el País de las Maravillas de Tim Burton, y siguiendo con Maléfica, Blanca Nieves y el Cazador, Into de Woods, la próxima a estrenarse «La Cenicienta» y las que se vienen: El Libro de la Selva de Favreau y La Bella y la Bestia con Emma Watson.
Y como Burton fue el pionero, ya tiene otro proyecto entre manos. Se trata de una nueva versión del clásico de Disney «Dumbo». ¿Cómo va a ser la peli? Atentis: se cree que va a ser una mezcla de actores y carne y hueso con un poco de CGI.
Todavía no tiene ni fecha de estreno, pero no la esperemos hasta tres años en adelante. ¿Puede salir algo bueno de esto? Yo creo que no.