Acá en NeetEscuela no hemos hablado mucho de las Guerras Mundiales, y la verdad es que no se entiende bien por qué. De todas maneras, por algo se arranca con estos temas tan importantes y qué mejor que hablar de la Primera Guerra Mundial, esa que fue tan polémica en su momento, y que si fue opacada fue por una de sus consecuencias directas: la Segunda Guerra Mundial, con su horror del holocausto, el «villano» de turno como fue Hitler y toda la Guerra Fría posterior. Pero mejor arranquemos analizando las alianzas de la Primera Guerra Mundial.
La formación de las alianzas de la Guerra Mundial I ocurre en un proceso histórico llamado «La Epoca de la Paz Armada», un período de «calma de tormenta» comprendido entre de 1870 a 1914 (el inicio de la Primera Guerra Mundial). Todo comienza con la postura de Alemania (y de su canciller Bismarck) que, enemiga de Francia, empezó a formar una serie de alianzas de tal manera que se aseguraba que sus vecinos europeos se quedaran solos en un eventual conflicto.
Hay que tener en cuenta que en la formación de las alianzas el ojo estaba enfocado en Gran Bretaña: todos los paises involucrados querían acabar con el poder colonizador que este país tenía con Asia y África. Así, básicamente, el país europeo se dividió en dos: La triple Alianza conformada por Alemania (un país relativamente nuevo en términos militares, ya que apenas se habían unificado internamente), Hungría-Austria e Italia, y del otro lado teníamos la alianza franco-rusa.
Finalmente, los británicos y los franceses hicieron algo increible: dejaron de lado sus difeencias colonizadoras, llegaron a un «entendimiento» y así se formó el Triple Entente conformado por Gran Bretaña, Francia y Rusia.
La Primera Guerra Mundial comenzó con atentado de Sarajevo, donde estas alianzas de guerra se llevaron a cabo, aunque Italia después no cumplió con su parte y terminó ayudando a atacar contra Austria-Hungría.