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Las bebidas light favorecerían la aparición de Diabetes

Bebidas light y Diabetes

La Diabetes es una enfermedad caracterizada por un déficit de Insulina, la hormona que se encarga de «utilizar» el azúcar (glucosa) disponible en sangre. Existen dos formas de la enfermedad, la Tipo I que se da en personas jóvenes en general con una historia familiar de Diabetes, y la Tipo II de aparición tardía alrededor de los 40-50 años, relacionada con ciertos hábitos o factores de riesgo como el tabaquismo, el sedentarismo, la obesidad, mala alimentación, etc.

Ahora parece ser que, al contrario de lo que se podría suponer, las bebidas ligth, es decir, aquellas libres de azúcar y que llevan en su reemplazo edulcorante, podrían aumentar el riesgo de desarrollar Diabetes Tipo II. Así lo demostraron un equipo de investigadores franceses que estudiaron durante 14 años (desde 2993 hasta 2007) a un grupo de aproximadamente 66000 mujeres.  Se tuvieron en cuenta sólo los casos de Diabetes desarrollados durante ese período. Los resultados revelan que el riesgo de contraer Diabetes Tipo II se incrementó más del doble en las personas que consumían aproximadamente un promedio de 1, 5 litros de bebidas con edulcorante, en contraposición con sólo un 50% más de riesgo para aquellas que bebían lo mismo de bebidas azucaradas. Mientras que las que consumían jugo de frutas frescas no presentaron aumento de riesgo o este no se evidenció.

Igualmente hay que tener en cuenta que este estudio sólo confirma en una gran población la relación estadística que existe entre el consumo de bebidas light y la aparición de la enfermedad en cuestión, teniendo en cuenta que se trato lo más que se pudo de que no haya sesgos por la presencia de otros factores de riesgo como el tabaquismo o el sobrepeso en la población estudio. Pero el estudio no da una respuesta al por qué de esta asociación casual. Si hay algunas hipótesis como, por ejemplo, que el edulcorante engañaría al cerebro el cual mandaría la información para que se libere insulina pensando que lo que se ingirió es azúcar. La insulina actuaría con el azúcar que había ya en el organismo por lo que los niveles disminuirían obligando a la persona a consumir, esta vez sí, azúcar para reponer los niveles.

Por supuesto estas son sólo hipótesis y hay que tomar todo con algo de pinzas, pero no hay que dejar de decir que la información a la que se arribó es muy valiosa y que habrá que seguir trabajando para ahondar un poquito más en el tema.

Vía: Intramed.net