Hoy voy a concurrir a una charla denominada: “Piedras en el camino de la civilización”, que se da dentro del marco de la 6º Olimpíada Internacional de las Ciencias de la Tierra. Este tema me inspiró para contarles que papel tuvieron las rocas y sus derivados en la historia de la humanidad.
Las piedras, ya sea rocas, minerales o productos derivados siempre han acompañado la vida del hombre, tanto a un nivel cultural como social. Hasta hace unos 8000 años, cuando se utilizó el metal por primera vez, los hombres usaron utensilios de piedra durante más de 2,5 millones de años. Con estas realizaban raspadores, hoces, martillos, puntas de armas, entre otras herramientas que básicamente las usaban para matar animales, cortar carne, derribar árboles, tallar madera y hasta cosechar su siembra.
Desde estos tiempos primitivos se usaban granos gruesos como el basalto o el cuarzo, que eran muy difíciles de trabajar, pero desde hace unos 2 millones de años ya podían modelarlas con herramientas útiles. Las piedras más aptas para modelar son las de grano fino como el pedernal, la cuarcita y la obsidiana, ya que de estas pueden desprenderse finas lajas fácilmente. Los hombres de la prehistoria descubrieron y se ingeniaron para sacar lascas de un bloque de piedra, al golpearlo cerca de los bordes utilizando otra piedra; pero hace unos 200.000 años se les comenzó a adaptar un mango de madera a la piedra, que se fijaba con fibras vegetales. Las lascas más pequeñas se usaban para realizar flechas, lanzas y cuchillos, y se cree que hace unos 8.000 años los pueblos agricultores descubrieron técnicas para afilar sus herramientas, empleando una roca dura y mojada y grano de arena que usaban como lijas.
Pero más allá de ser útiles como armas y herramientas, estas han sido una parte más que importante en la vida artística y cultural. Las rocas fueron la materia prima para las esculturas, y además la fuente de pigmentos para los pintores. Las llamadas pinturas rupestres, son dibujos prehistóricos que se hallan en algunas rocas o cavernas, hay pinturas datadas hasta 40.000 años de antigüedad que se encuentran en España y Francia.
El arte rupestre, revela que el hombre ya desde hace mucho tiempo organizo un sistema de representación artística, donde plasmaba sus ideas, su visión del mundo. Para pintar las mismas los hombres buscaban pigmentos de origen vegetal como el carbón, la arcilla, entre otros, que mezclaban con aglutinantes orgánicos como resina o grasa para formarlas. Los colores que se utilizaban eran generalmente el rojo, amarillo u tonos de ocre; los mismos los untaban directamente con los dedos, aunque también podían escupirla sobre la roca o soplarla con una caña hueca.
Como podemos ver las rocas han sido fuentes de inspiración, herramientas, material de construcción; colaborando desde tiempos prehistóricos en la evolución social y cultural de la humanidad.
Vía: Selecciones y Wikipedia