Cuando miramos una fotografía de lo urbano o de un espacio rural claramente identificamos que imagen corresponde con cada sector. Sin embargo existen criterios específicos de diferenciación: criterios morfológicos, socioeconómicos, estadísticos, que permiten determinar si vivimos en un espacio rural o urbano.
Los criterios morfológicos tienen que ver con las formas espaciales que adopta la organización social. La distancia entre viviendas, si hay transporte publico, escuelas, hospitales, las características de los caminos, etc. Por ejemplo en lo urbano podemos decir que se concentran los edificios, existen los servicios básicos, etc. En lo rural las edificaciones son aisladas, la población esta dispersa en el territorio, las construcciones son silos o galpones para guardar maquinarias.
Los criterios socioeconómicos hacen referencia a los tipos de actividad económica que allí se realiza. En los ámbitos rurales predominan las actividades primarias como la agricultura y la ganadería. En los ámbitos urbanos se realizan aquellas actividades complementarias como actividades secundarias (industria y construcción) y terciaria (servicio). En la ciudad ocurre que muchas industrias por la contaminación que generan han sido relocalizadas, por lo cual la desindutrialización de las ciudades genero que se produzca un crecimiento en la ciudad de las actividades terciarias. Otro criterio que nos permite identificar los criterios socioeconómicos son los flujos de movilidad de las personas en torno a una localidad, ciudad o zona a estas se las conoce como áreas funcionales, por ej. La ciudad autónoma de Buenos Aires.
Los criterios estadísticos hace referencia a la cantidad de habitantes que existen y hay un numero que determina que por encima de valor el sector deja de ser rural para ser urbano. Cada pais establece su propio umbral de medición y pueden modificarse con el tiempo, esto se debe al territorio que posee. En la Argentina el umbral es de 2000 habitantes, en Suecia es de 200 habitantes.