Saltar al contenido

Orange Is The New Black, renovada

Netflix es, actualmente, una bestia. El masivo éxito de esta plataforma ha marcado, claramente, un antes y un después en la historia moderna actual. Cambió todo lo que teniamos asumido sobre la tevé e impuso, pese a que a simple vista no parece muy innovador, una alternativa para la televisión que es impactante, tanto por su desarrollo como por su éxito. De hecho, ha sido tanto este éxito (inconmensurable, por cierto) que muchísimas plataformas han querido igualar la fórmula bajo su propia impronta. Estamos hablando, claramente, de la televisión por streaming, servicio que ofrece sus propios paquetes completamente legales que, con un costo de alquiler (mínimo si comparamos con los gastos que realizaríamos por otras vías legales) alcanza para ver lo que querramos, tanto series como películas. Tan sólo eso ha convertido a Netflix lo que es hoy.

De hecho, al ver que la cosa funcionaba Netflix se puso más las pilas y apostó a más grande: comenzó a producir sus propias series para poder publicarlas en exclusividad por su plataforma. No sólo esto funcionó, sino que actualmente se considera que una de las mejores series americanas es de su sello: House of Cards.

Otro gran éxito es Orange is The New Black, que ya falta poco para que se lance con todo la tercera temporada en su totalidad. Pero viene con sorpresa la cosa, porque ya con el anuncio de la salida de la tercera también han confirmado la realización de una cuarta. Y que se hagan muchas más.

Por ahora, tan sólo temblamos con la idea de que Netflix logre su gran cometido: publicar algo de su autoría continuamente durante todo el año cada dos semanas.