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Prejuicios, etnocentrismo y racismo

Para que estos fenómenos se den es necesario que se produzca un encuentro entre grupos sociales; antiguamente se creía que los grupos humanos no tenían contacto, en cambio la antropología desmintió este hecho afirmando que casi todas las sociedades han tenido contacto con otras a través del mestizaje, guerras, migración o intercambio.

Cuando en el siglo XV Europa pasa de la oscura etapa medieval a la era de los descubrimientos, se cambian todas las ideas que se tenían sobre geografía, teología, historia y naturaleza del hombre, entre otros. Cuando entran en contacto con culturas desconocidas se duda hasta si los seres que habitaban América eran hombres, hasta que en 1537 la Bula papal los califica como humanos pero con mentalidad de niños a los cuales había que educar y adoctrinar.

A partir de estos acontecimientos se van a empezar a dar una serie de pensamientos sumamente racistas, evolucionistas y de un europocentrismo acentuado. Los cuales van a desarrollarse aun más cuando Darwin en 1859 escribe El origen de las especies, dando pie a teorías como el darwinismo social y teorías como:

-La cosificación de la inteligencia

-Teoría de la recapitulación

-Test de inteligencia -sumamente manipulados-

-Teoría del criminal nato

Todas estas teorías se construían en base a prejuicios, estereotipos, racismo y etnocentrismo Europeo o de sociedades blancas.

El etnocentrismo se define como la actitud de un grupo que consiste en atribuirse un lugar central en relación a los demás grupos, y utilizar un lenguaje o acción despectiva hacia los demás. Existe el etnocentrismo de primer grado (es el más evidente, donde el grupo se autoelogia y caracteriza de modo despectivo a los demás), de segundo grado ( de apariencia inocente pero que encubre un razonamiento elogioso para él en-grupo y desfavorable a los grupos de afuera), y por último el de tercer grado (donde se presenta con una presentación aparentemente elogiosa del otro grupo).

En tanto el racismo se basa en relaciones asimétricas y desiguales, que implican discriminación, subordinación y explotación de los otros en nombre de posibilidades o disponibilidades biológicas, sociales o culturales. Es toda relación que cosifique al otro, y le niegue hasta su categoría de persona.

Finalmente los prejuicios sos sistemas de valores o juicios coherentes que tienden a dar sentido a la acción humana de una manera simplificada y generalizada. Estos no se construyen de manera azarosa sino que responden a intereses o conflictos.

Lamentablemente estos fenómenos aun se siguen dando, y han sido generadores y desencadenantes de algunos de los hechos más lamentables de la historia como el nazismo, el apartheid, entre otros.