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Preparar temas para un examen

Ayer te conté un poco la experiencia de rendir un examen, y todo le proceso de sensaciones que solemos sufrir cuando este se acerca. Hoy trataremos algo relacionado, ¿cómo preparar temas para un examen?

Bueno supongo que esto es bastante personal, y que cada uno tendrá sus pasos a seguir para estudiar y fijar los temas, pero daremos algunas opciones y diré que la clave principal –estudies como estudies- para tener éxito en una evaluación es: relacionar los temas y no estudiar de memoria.

Lo primero antes de sentarte a estudiar es haber prestado atención en clases, y preguntar al profesor las dudas que teníamos sobre algún que otro tema. Haceme caso, aunque a veces puede ser fastidioso, si prestas atención en clase tenés el 50% del trabajo hecho.

A mí me servía una vez que tenía el texto darle una lectura y a su vez en una hoja a parte ir haciendo resúmenes, cuadros, anotando palabras claves, en fin, todo lo que me podía servir. Eso sí, siempre hice mis resúmenes atractivos, creo que ponerte a estudiar de una hoja que tiene todo escrito con lapicera así nomas no es muy provechoso, por lo contrario si lo llenas de colores, combinas cuadros con conceptos y palabras claves, estudiar será hasta más divertido. Además es una muy buena técnica para aquellos que tienen memoria visual.

Lo importante es ir relacionando los temas y posturas de los autores sobre el mismo, entonces por ejemplo si tratamos el tema de la religión y vemos diversas posturas para conceptualizar esta, podemos hacer cuadros comparativos entre los autores, destacando que piensan en común y que no.

Relacionar, comparar, hacer dialogar los textos es lo que hace que aprendamos, que recordemos los temas y que realmente los entendamos. Si en cambio estudiamos y forzamos nuestra mente a fijar cosas de memoria, de seguro, lo resultados no van a  ser los mejores.

Lo mejor es conocerse, saber cuáles son nuestras debilidades y fortalezas para estudiar, y ser ingeniosos. Si estudiar los huesos del cuerpo humano te resulta aburrido, quizás dibujando un esqueleto colorido y colocándole los nombres que corresponden al lado de cada hueso, la tarea  se nos va a hacer más llevadera.

Pensa, proponé, imagina, trata de decir las cosas con tus palabras,  relacioná… esa esas son las calves para un resultado exitoso.