Previo a comenzar a explicar de lleno qué son las partículas subatómicas vamos a dar una breve introducción al origen etimológico de las palabras que conformar el término.
PARTÍCULA deriva del latín y se le puede otorgar el significado «parte pequeña».
SUBATÓMICA, por su parte, se formó a partir de la suma de dos componentes: «sub», que significa «debajo», y «atómico», que hace alusión a todo aquello que no puede dividirse más de lo que ya se dividió.
Qué es una partícula subatómica
Dicho esto ya podemos adentrarnos a lo que en realidad son las partículas subatómicas en el campo de la física. Podemos decir que se trata de fragmentos de materia muy pequeños que, pese a sus dimensiones ínfimas, mantienen sus propiedades químicas intactas. Que sean subatómicas quiere decir que pertenecen a un nivel mucho menor que el del átomo, por eso se dice que las partículas subatómicas son partículas elementales más pequeñas que un átomo (aunque pueden también ser compuestas).
Los ejemplos más claros -y conocidos- de partículas subatómicas son los electrones, protones y neutrones, los cuales se conocen en conjunto como quarks.
Es importante tener en cuenta que es muy difícil poder hallar partículas subatómicas en su estado elemental en nuestro planeta pues, debido a su gran inestabilidad, se descomponen fácilmente originando nuevas partículas.
Si bien decíamos que los neutrones, protones y electrones son las partículas subatómicas más conocidas, existen también muchos otros tipos de elementos que poseen sus mismas condiciones. Un ejemplo de ello son los neutrinos, hadrones y piones.
Existen dispositivos creados por el hombre que son capaces de generar partículas subatómicas que imitan el comportamiento de la naturaleza. A esos aparatos se los denomina aceleradores de partículas.
Muchas ramas de la física se ocupan del estudio de las partículas subatómicas como, por ejemplo, la física cuántica, la física de partículas, la nuclear y atómica. La mecánica cuántica también hace hincapié en ellas.