A lo largo de estas líneas hablaremos hoy acerca de qué son los linfocitos, un tipo de glóbulos blancos imprescindibles para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico.
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Valores de los linfocitos
Los linfocitos pueden defender al cuerpo de las posibles infecciones que atraviese, siendo capaces de distinguir las células del propio cuerpo de las extranjeras. Cuando estas organelas reconocen la presencia de algún material extraño en el cuerpo, generan ellas mismas sustancias químicas que permiten destruirlo.
El recuento de los linfocitos se expresa como un porcentaje al total de células blancas de la sangre. En personas sanas, representan aproximadamente el 20-45% de todos los glóbulos blancos presentes en la sangre. El rango normal para dicho recuento ronda entre los 1000 y 4000 μL para un adulto, y entre los 3000 y 7000 μL para un bebé recién nacido.
El aumento en la concentración normal de linfocitos es, generalmente, un signo de infección viral. Un alto conteo de linfocitos con un bajo recuento de neutrófilos podría ser causado por el linfoma, mientras que el aumento general en el número de linfocitos recibe el nombre de linfocitosis. La leucemia, por ejemplo, es una enfermedad generada por el aumento en el número de linfocitos en sangre.
La disminución en el número normal de linfocitos puede resultar de varios trastornos en sangre, o derivar de otras enfermedades. Por lo general, se asocia a infecciones post-cirugías o a traumatismos. El bajo número de linfocitos recibe el nombre de linfopenia.
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Existen diversos tipos de linfocitos, entre los cuales podemos mencionar:
- LINFOCITOS T. Imprescindibles en la inmunidad celular. El nombre que reciben se debe a la zona de maduración, el timo, glándula situada en el pecho.
- LINFOCITOS B. Responsables de la inmunidad humoral. Permiten que los anticuerpos se puedan unir a los patógenos, bloquear su invasión, activar el sistema del complemento y aumentar la destrucción de patógenos. Los linfocitos B se ubican en la médula ósea hasta su maduración, momento en el que se expanden por todo el cuerpo, concentrándose en zonas como el brazo y los ganglios linfáticos.
- CÉLULAS ASESINAS NATURALES (NK). Conforman el sistema inmunológico innato, jugando un papel importante en la defensa del huésped de ambos tumores y células infectadas.
En cuanto a las funciones que cumplen los linfocitos, podemos decir que son capaces de generar productos químicos para luchar contra moléculas extrañas que se hacen presentes en el cuerpo humano, las cuales reciben el nombre de antígeno. Cada linfocito es específico para cada antígeno.
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Los linfocitos que participan en la inmunidad adaptativa, es decir, en células B y T, se diferencian luego de la exposición a un antígeno: son capaces de generar linfocitos efectores de memoria.
Los linfocitos efectores cumplen la función de eliminar el antígeno, mediante la liberación de anticuerpos, gránulos citotóxicos o por la señalización a otras células del sistema inmune. Por su parte, los linfocitos de memoria se ubican en los tejidos periféricos.
Cualquier linfocito puede vivir de semanas a varios años, tiempo prolongado en comparación a los leucocitos.