La osteoporosis se define como un disbalance entre la producción de hueso y la resorción del mismo. Es un problema de salud que afecta a un amplio grupo de la población y cuyo principal problemas es el aumento de riesgo de fracturas patológicas. Se pueden dividir en dos tipos principales: primarias y secundarias. La primarias son las más frecuentes.
Dentro de las osteoporosis primarias encontramos 3 tipos:
– Tipo I o Postmenopáusica: afecta a mujeres después de la menopausia y es porque la isminución de estrógenos deja de proteger al hueso de la acción de los osteoclastos. Hay más riesgo de fractura vertebral y de extremos distales de antebrazo o también llamada Fractura de Colles…
– Tipo II o Senil: afecta a ancianos y obedece a un proceso propio del envejecimiento. En esta hay disminución de la acción de osteoblastos y, por lo tanto, se forma menos hueso. Favorece la aparición de fracturas vertebrales, de cadera, de epífisis proximal de húmero, entre otras.
– Osteoporosis juvenil idiopática: muy rara
Dentro de las osteoporosis secundarias encontramos diversas causas:
– Por enfermedades endócrina como hipercortisolismo, hipertiroidismo, hiperparatiroidismo e hipogonadismo.
– Enfermedades genéticas como la osteogénesis imperfecta
– Por el consumo de ciertos fármacos como corticoides y heparina.
– Por otras enfermedades como Artritis Reumatoidea o Mieloma Múltiple.
Para más información sobre este tema, en esecial sobre como evitarlo o prevenirlo, les recomiendo leer la siguiente nota: Novedades sobre osteoporosis.