Hoy, 5 de noviembre, se celebra el día de la aviación civil; al escuchar esta noticia por la radio me pregunte: ¿Por qué?
Este día se conmemora en homenaje –y recordando su natalicio- de Don Aaron Féliz Martin de Anchorena, quien nace un día como hoy en Buenos Aires en 1877. El mismo tuvo una vida llena de aventuras y riesgos, por ejemplo en 1901 participó de la primera competencia automovilística, que se llevo a cabo en el Hipódromo Nacional de Buenos Aires.
Un año después decidió recorrer la Patagonia a caballo, y ahí se encontró con el Perito Francisco Pascasio Moreno, llegando hasta el Nahuel Huapi y la isla victoria, la que quiere adquirir para plantar diferentes especies de coníferas; aunque el Congreso una vez realizada la obra le negó la cesión, aun podemos ver su gran obra.
En 1905 se encargaba ad-honorem de la Secretaría de Legación Argentina ubicada en Francia, y voló en un aerostato con un brasileño llamado Santos Dumont. Una vez realiza la hazaña se asocia al Aero Club francés, y allí comenzó su pasión. Completo más de 11 vuelos, y en 1907 trajo su globo a la argentina.
Ese mismo año, junto al ingeniero Jorge Alejandro Newbery, a bordo de su globo bautizado “el pampero”, realiza una ascensión desde la sociedad Sportiva Argentina; siendo esa la primera actividad aérea ejecutada por argentinos y siendo considerada el origen del vuelvo civil y militar de nuestro país.
Un año después, el 13 de enero y bajo la presidencia de Anchorena se funda el Aero Club argentino, institución madre del vuelo organizado nacional
Vía:Marambio