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Ventilación – Maneras de ventilar

En “Ventilación”, se dio una introducción de lo que significa ventilar. Hoy evaluaremos tres formas de llevar adelante la ventilación.

La ventilación puede llevarse adelante mediante las siguientes formas: por extracción del aire viciado del local, por impulsión de aire nuevo dentro del local o por extracción e impulsión reunidas en una misma instalación.

El sistema de extracción de aire es el más utilizado y consiste en disponer en el local a ventilar una serie de ventiladores extractores, que aspiran el aire del interior y lo expulsan al exterior. Es necesario que en otros puntos del edifico haya huecos por los que pueda entrar el aire limpio. Esto huecos pueden ser ventanas, puertas, rendijas o toberas.

En el método por impulsión, los ventiladores recogen el aire exterior limpio y lo empujan al interior del local, creando una sobrepresión que obliga al aire impuro a salir por las aberturas previstas para tal fin. A su vez, la sobrepresión impide que el aire del exterior entre por sitios que no están dentro del planeamiento general de la instalación. Una de las ventajas de la impulsión es la de sumarle al ventilador un filtro, para retener las partículas contaminantes provenientes del exterior.

En el sistema de extracción – impulsión reunidas en una misma instalación se usan ventiladores para impulsar el aire limpio y para extraer el viciado; por un lado, tendremos depresión (extractores) y, por otro, sobrepresión (impulsores) siendo conveniente que los impulsores den más aire que el desalojado por los extractores para que dentro del recinto exista sobrepresión.