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Adicción al estudio

Quizás te parezca extraño que alguien pueda volverse obsesivo y adicto a esto, pero sí, hay muchas personas que con el tiempo se vuelven adictos al estudio, y en esta nota voy a contarte un poco sobre esto.

La adicción al estudio es como cualquier otra, implica riesgos y conductas no normales que en este caso se relacionan con estudiar.  De este modo estas conductas pueden ir generándose de poco, cuando la persona lentamente va dedicándole más horas a esto y además volviéndose obsesiva y exigente en este tema.

Esta es considerada una neoadicción, es decir, propia de la sociedad contemporánea, y básicamente genera una gran desestabilidad en aquel que lo padece. La gran competencia actual y la exigencia, hacen que muchos quieran rendir aun más de lo que pueden o deben, y sentir que es necesario estudiar más para sacarse puros dieces.

Los adictos al estudio pueden pasarse horas, y días estudiando sin  parar, incluso postergando cosas vitales como comer, dormir o ir al baño, para no perderse un minuto de adquirir nuevos conocimientos.

Estas conductas suelen despertarse cuando sentimos que no es suficiente lo que sabemos o rendimos, y queremos aun ser mejores, a costa de cualquier cosa. Sentir que si no es un diez no sirve, como si la nota determinara cuanto sabemos, es un síntoma claro; pero incluso a veces hasta ser los mejores no alcanza, ya que se aspira a ser perfectos, algo que como bien sabemos es inalcanzable, por tanto el adicto nunca cesará porque no llegara a su meta.

Esta adicción puede traer consecuencias graves, como: no comer lo suficiente, no dormir, no descansar, no tener otras actividades que no sean las de estudio, no tener vida social, desarrollar otras fobias o incluso tomar fármacos para estar más horas despiertos o más concentrados.

Lo mejor ante estos casos es que sea el entorno social más próximo quien detecte el problema y acudan ayuda profesional.