Charles Darwin es uno de los símbolos de la evolución más icónicos de la historia del ciencia, así como es Einstein y los inventores que tanto quieren los americanos, como Edison. Sabemos que Darwin es quien inventó la evolución tal como la conocemos, pero no todos saben que las leyes de Darwin están casi todas descartadas, ya que Charles en su época no pudo explicar muchos sucesos, que ahora con los conocimientos de genética se ha podido conocer. La otra que no muchos saben es que Darwin no fue el único en proponer esta teoría. Pero mejor hagamos un breve repaso de Charles Darwin y la teoría de la evolución.
Charles Darwin y la teoría de la evolución
Antes de la teoría de la evolución, lo que se pensaba era que las especies habían sido creadas de una manera fija y que a lo largo del tiempo nunca se fueron modificando. Lo que se sabe ahora, claramente, es muy distinto a esto. Lo que propone la evolución es lo siguiente: los organismos sufren alteraciones a lo largo del tiempo, en donde la prevalencia histórica se basa en aquellas nuevas características que ayudan a dicho organismo a sobrevivir en el hábitat en que se encuentra. Toda la teoría de la evolución de Darwin se resume en la siguiente frase: «la supervivencia del más apto».
Charles Darwin había escrito su famoso libro «El origen de las especies» pero no se animaba a publicarlo debido a sus ideologías religiosas. Finalmente llega en 1858 para su sorpresa un manuscrito de un tal Alfred Russel Wallace, que había llegado a las mismas conclusiones de selección natural que Darwin, lo que le obliga finalmente a publicar su texto y, pese a que no fue el pionero, atribuírse casi todo el crédito de un descubrimiento histórico. Luego ambos, Darwin y Wallace, publicaron un texto en conjunto a la Sociedad Linneo de Londres.