Pensando la educación no descansa en enero, porque educarnos es una tarea continua, no importa la época del año ni las vacaciones, por eso hoy te traigo un tema relacionado con la educación y el verano, en donde me pregunto: ¿Colonia de vacaciones o escuela de verano?
Bueno por comenzar son dos cosas muy diferentes que tiene algo en común: la educación. En las escuelas de verano generalmente se preparan contenidos específicos ya sea para que las presencien alumnos que adeudan materias y quieren prepararse, aquellos que deseen hacer algún curso que otorgue créditos en una Universidad, o simplemente los que quieren seguir cultivando su educación en algún tema específico.
Generalmente las escuelas de verano sirven más bien para estudiar contenidos más de índole académico, incluso a veces con evaluaciones para aprobar dicho curso. Por ende requiere más estudio, compromiso, concentración, aunque nadie dice que no pueda llegar a ser un experiencia divertida.Cabe destacar también que las mismas suelen ser menos exigentes y que en torno a un ambiente lúdico y mas relajado se pretende la incorporación de ciertos contenidos en los que las presencien.
Por el otro lado están las colonias de verano, esa que generalmente van los más chicos y donde se hacen actividades al aire libre, juegos, natación; sin dudas el fin que las mismas persiguen es mas de índole recreativo, pero sin embargo también nos educan. En las mismas muchos de nosotros aprendimos a nadar, a jugar a algún deporte, y nos enseñan algo importantísimo en la vida: compartir, jugar, reírse, divertirse!.
En las colonias no hay pruebas o evaluaciones que pasar, ya que generalmente a finalizar la misma se hace una presentación para que los padres más que nada, vean la “evolución” de sus hijos en algún aspecto –generalmente natación- pero no se califica, es más bien recreativo también.
Como bien vemos ambas tiene cosas diferentes y fines distintos, pero ambas también educan a su modo, y pasar por estas es una experiencia maravillosa y fructífera.