Nuestro propósito para el día de hoy es hablar sobre el niño y la investigación; cómo enseñarle a un niño a investigar y qué tener en cuenta para el mismo aprenda.
Enseñar al niño a investigar
La investigación es una herramienta de excelencia que padres y docentes utilizan para despertar el interés en los más pequeños por el aprendizaje de cualquier tipo. Claro que enseñar a un niño a investigar es todo un proceso, un tanto complejo quizás, para los adultos, pero valdrá la pena hacer el intento y lograr el objetivo. De ese modo, el niño ingresará a un mundos de posibilidad de conocimiento realmente increíble.
La técnica de la investigación se ha incorporado ya como un método didáctico de enseñanza; investigar es explorar aquello que despierta nuestro interés, es explorar nuestros propios medios y lo que está a nuestro propio alcance.
Ahora bien… ¿Cómo enseñarle a un niño a investigar? Existen muchos modos y estrategias para lograrlo y que a todos les llegue el interés por la investigación. Partiremos de tener en cuenta que a los niños inclinan su atención por aquellas cosas que les permiten hacer volar su imaginación.
Es por ello que aprender a investigar produce una especie de deseo por el conocimiento del cual ellos no sólo son protagonistas sino también formadores de la misma investigación. Los niños que no saben en qué consiste el proceso de investigación, seguramente no hayan tenido nunca la posibilidad de experimentarlo; pero, una vez que se les enseñe, lo más probable es que les resulta realmente apasionante.
A continuación enumeraremos algunos de los beneficios que lograrán los niños al investigar por sus propios medios:
- Experimentar nuevos campos de interés.
- Posibilidad de ver el futuro de un modo constructivo al mismo tiempo que eleva su capacidad crítica del presente, formando niños más participativos e involucrados a nivel social.
- Fomentar el espíritu científico y de aventura, pues mediante la investigación los niños pueden mostrar sus habilidades creativas y de ingenio.
- Promover el movimiento del cuerpo.
- Estimular la capacidad de asombro. En este sentido es importante no proporcionarle todas las respuestas, más bien es el docente el que debe hacer las preguntas para que los niños se sientan motivados a hallar las respuestas.
Para enseñarle a un niño a investigar, es necesario tener en cuenta lo siguiente:
- Encontrar un tema que sea de su interés.
- Plantear preguntas, lo cual puede ir acompañado de la propia experiencia del niño. Por ejemplo, si el niño tuvo interés por el apareamiento de dos animales, será muy importante mostrarle un vídeo donde se pueda ver el proceso; si su interés fue sobre la vida de un prócer o un acontecimiento histórico ve una película sobre el tema o visita un museo para que ellos mismos empiecen a preguntarse cosas.
- Hacer que los niños se animen a preguntar, ya que es la mejor manera de comenzar la investigación.