Este sábado temático va a ser bastante particular, ya que no vamos a focalizar sobre algo puntual sino sobre varias: nuestros intereses, la actualidad y obviamente en esta sección la educación.
Al pensar no es fácil relacionar tantas cosas, pero haciendo el ejercicio me di cuenta que no puedo no dejar de hablar sobre las inundaciones ocurridas en La Plata y la situación de la educación hoy en día en esa ciudad-algo que también me interesa y preocupa-.
Parece ser que con el 18 A –cacerolazos en contra del gobierno- y los informes que salieron a la luz sobre presunto lavado de dinero que involucraría a funcionarios relacionados con el poder de turno los argentinos nos olvidamos cada vez mas de la tragedia ocurrida en La Plata hace unos días apenas.
Hace dos días tuve la oportunidad de charlar con un soldado de la ciudad que fue como ayuda al lugar, y lo que me conto me dio sensación de bronca, tristeza e impotencia; las mismas sensaciones se notaban en su rostro…
El lugar sigue siendo un escenario que nadie quisiera vivir, donde familias que perdieron todo recién ahora están tratando de acomodarse frente a una realidad que en vez de facilitarle las cosas, se las complica. Aun siguen personas sin aparecer, casas completamente inundadas, mascotas perdidas y –aquí nuestro interés en esta nota- escuelas sin clases o que frente a esto hacen lo que pueden…
Como consecuencia del temporal muchas escuelas quedaron en situación grave, principalmente a nivel edilicio, recordemos que un 70% de estas sufrieron daños y 5 quedaron directamente inutilizables debido a los daños. Pero no solo podemos hacer hincapié en las estructuras, ya que muchos de los que integran la comunidad educativa –directivos, docentes, alumnos…- perdieron desde la casa hasta algún familiar, quedando también la parte emocional y psicológica muy dañada.
Además otro aspecto a tener en cuenta son las pérdidas materiales –más allá del edificio en sí- con esto me refiero a libros, pupitres, computadoras, elementos de educación física, y todo lo que existe y es necesario en educación para llevarla delante.
Ante esto ¿cómo se sigue?, creo que la rápida acción de los funcionarios es una de las claves, ya observamos como la sociedad toda se puso en marcha con las donaciones y la ayuda en todo sentido, ahora es tiempo de que los funcionarios que fueron elegidos por el pueblo activen, dialoguen y encuentren una solución justa, rápida y equitativa para aquellas víctimas de la inundación.
Es hora a nivel político que se dejen un poco las banderas de un lado, y se trabaje por el bien común; el pueblo pide eso, creo que los políticos aún no entienden que ese lugar implica responsabilidad y trabajo para la gente que –vuelvo a repetir- es quien los puso allí. NO tenemos que caer en la naturalización de las cosas, esto implicaría que –como está pasando- el hecho se olvide y se vuelva a repetir en un futuro; lo que pasó es grave e implica análisis, acciones y precauciones.
En cuanto a lo educativo nos debemos muchos debates como sociedad, y también me parece que es hora que de que se entienda que lomas importante que tiene un pueblo es la educación, y por ello debe pedir.
Veamos otras notas en relación a nuestro sábado de Neetanálisis:
Las descargas y el mundo actual
Enfermedades frecuentes relacionadas a las inundaciones