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Ley de convertibilidad

Menem y Cavallo

Durante la presidencia de Carlos Menem, se designa como ministro de economía a Domingo Cavallo en el año 1991; este pone en marcha en este año un plan económico de estabilización muy particular. Sanciona la ley de convertibilidad en abril, donde imponía un tipo de cambio de la moneda argentina fijo con respecto al dólar, el mismo fue establecido en $1, y obligaba al Banco central a mantener tanto las reservas en oro como de moneda extranjera por el equivalente al dinero circulante.

Durante el gobierno de Menem se tomaron un par de medidas económicas y políticas que van concluir en este plan de convertibilidad. Primero se inicia un programa donde se promocionaban las exportaciones argentinas; por ende se reducía al límite el consumo interno para poder exportar, este plan falla en 1990 por eso el gobierno cambia de estrategia y un año después lanza este programa de convertibilidad.

Conjuntamente con la política de fijar la equivalencia de un peso un dólar, el gobierno cuenta con la ventaja de crédito internacional; a su vez, se lanza un plan de privatizaciones, donde industrias y servicios públicos que eran propiedad del estado, pasan a manos privadas. A esto se le suma una apertura económica, donde se permitía el ingreso de productos extranjeros para exigir a la industria nacional a competir mejorando su tecnología y abaratando costos.

Un peso, un Dolar...

Este plan en un comienzo tuvo éxito, reduciendo la inflación y provocando un crecimiento en la actividad económica y el consumo. Pero también contó con grandes limitaciones:

1-se sostenía por capitales extranjeros; esto se siente cuando Estados Unidos retira sus capitales  y cuando se produce el “efecto tequila”, una devaluación del peso mexicano que repercute en toda América Latina.

2-Provocó una gran concentración de capitales en pocas manos, por ende, las pequeñas y medianas empresas sufrieron muchas dificultades a nivel económico.

3-Produjo serios efectos sociales, donde se deterioran la calidad de los servicios públicos, mayormente en la salud y en la educación, y trajo una gran ola de desocupación.

Hasta hoy en día sufrimos las consecuencias de este plan, donde por ejemplo muchas empresas aun siguen estando en manos extranjeras; y teniendo en cuenta lo que pasa con el dólar actualmente que se ha disparado con respecto al peso las polémicas se avivan con respecto a qué medidas tomar y bajo que consecuencias.

Vía:http://www.portalplanetasedna.com.ar