Los biocombustibles son combustibles que tienen un origen biológico obtenido de manera renovable, a partir de restos orgánicos. Los mismos son ecológicos, y se crean a partir de restos orgánicos como el azúcar, trigo, maíz o semillas oleaginosas.
Decimos que son ecológicos porque reducen notablemente el volumen de CO2 que se emite en la atmósfera. Estos generalmente son mixturados con otros combustibles en pequeñas proporciones –de 5 a 10%-, lo cual le proporciona una reducción útil pero a su vez limitada de gases de efecto invernadero.
Podemos concluir entonces en la definición diciendo que son energías renovables, bionergéticos; combustibles de origen biológico.
Dentro de este encontramos el Biodiesel que es un biocombustible que se genera a partir de grasa animal o aceites vegetales -usados o sin usar- como: el girasol, la soja o la canola. En algunos casos los productores lo cultivan exclusivamente para la producción de este combustible; el mismo puede usarse en estado puro o mezclado con gasoil. El mayor productor de este en el mundo es Alemania, luego están Francia, Estados Unidos o Italia.
La transformación de este combustible se hace por un proceso que se denomina transesterificación; a partir del cual desde el alcohol metílico, hidróxido sódico y aceite vegetal se obtiene un éster que se utiliza directamente en un motor diesel sin modificar.
También encontramos el bioetanol, que es un alcohol que se obtiene del maíz, del sorgo, de la caña de azúcar y de la remolacha; y permiten sustituir las gasolinas en cualquier proporción y de este modo evitar la contaminación ambiental. El principal productor de este es Brasil.
Po último encontramos el Biogas que resulta de la fermentación de desechos orgánicos, y la Biomasa que fue la primera fuente de energía conocida por la humanidad; cuando hablamos de esto nos referimos a la madera o excrementos secos que se pueden convertir en biocombustibles.
El problema de estos últimos es que si bien la madera es un recurso renovable, si no se utiliza con unas buenas medidas preventivas puede causar un desastre en la ecología; por eso la biomasa también usa como fuente de energía las virutas o el aserrín.
Vía: biodisol