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El Impresionismo

El Impresionismo

El movimiento plástico Impresionista surge en el S. XIX en Francia sin embargo su reconocimiento se produce en 1874 cuando realizaron su primera exposición. El Impresionismo plasma en sus obras el modo en que la luz proyecta la forma de los objetos y rostros.  El movimiento rompe con el clasicismo y se presenta en el escenario artístico como un quiebre que da inicio al  «arte contemporáneo» .

La técnica Impresionista se basa en captar  el modos en que la luz incide sobre los objetos  y los  cambios que generan en contornos difusos. A su vez pintaban con pequeños trazos sin definir figuras sino que el espectador es quien lograba a distancia apreciar la obra. Los colores que utilizaban fueron los  primarios esto hacia que sus obras se caracterizaran por un brillo particular. Algunos de los artistas que representan al movimiento son: Auguste Renoir, Claude Monet,  Alfred Sisley y Camille Pisarro.

Las temáticas que tomaban los  impresionistas para trabajar se contradecían con aquellos que la «academia francesa» reconocía. Esto se debía a que los artistas de este movimiento pertenecían a las clases bajas y medias sociales es por ello que pintaban temas cotidianos cercanos a su experiencia con un estilo libre. Socialmente se los conció como «los rechazados» y debieron buscar lugares alternativos para exponer sus obras. Incluso el nombre «Impresionista» se debe a una calificación peyorativa del  crítico Louis Leroy al ver una obra de Monet.

El Impresionismo fue el primer movimiento del arte contemporáneo. Logrando ser el impulsor de nuevas ideas, técnicas y temáticas para el arte. Rompió con la  academia  y esto permitió abrir nuevos horizontes de expresión para los artistas de la época.