En la otra nota del día te conté un poco sobre la vida de Michel Foucault, ahora brevemente voy a adentrarme en el concepto que quizás fue uno de los más debatidos, polémicos y estudiados por este: el de poder.
Este tratará el tema del poder rompiendo con las concepciones básicas del término, ya que para este el poder no puede ser localizado en el Estado o en la institución. El mismo de este modo no es considerado como un objeto que el individuo puede ceder, sino que más bien se trata de una relación de fuerzas estratégicamente planteadas en un determinado momento. Considerado así, el poder está en todas partes y todo sujeto está atravesado por relaciones de poder, y no puede considerarse independientemente de estas.
Foucault afirma que el poder reprime pero también produce, ¿qué produce? Bueno, efectos de verdad y saber en el sentido de conocimiento. Los trabajos del mismo juegan y analizan constantemente esta relación entre poder y conocimiento, por ejemplo este afirma que los sistemas de creencias ganan poder cuando un mayor número de gente la acepta, lo mismo pasaría en otras áreas como la medicina.
Las tesis de Foucault sobre el poder, se desarrollan en tres apartados básicamente:
• El poder no es esencialmente represivo; puesto que incita, suscita, produce.
• Se ejerce más que se posee; dado que no posee una forma definida; «el poder no es algo que se adquiera, arranque o comparta, algo que se conserve o se deje escapar; el poder se ejerce a partir de innumerables puntos, y en el juego de relaciones móviles y no igualitarias».
• Pasa por los dominados tanto como por los dominantes; ya que pasa por todas las fuerzas en relación.