Sí, llegamos un poco tarde pero no podíamos dejar pasar esta oportunidad de manijearnos incluso en este pequeño blog. Ayer les traje con mucha emoción el póster oficial de Star Wars VII: The Force Awakens, que está divino, ya lo analizamos y todo eso. El lunes nos quedamos hasta tarde no porque estaba Marcelo Hugo en la televisión, sino porque en la televisión americana estaba sucediendo un hecho histórico: estaban jugando un partido de futbol americano. Bueno, así suena cualquier cosa pero lo que pasaba era que, durante el entretiempo, no tendrían spots con «No fue magic» sino que iban a pasar nada más y nada menos el tráiler de Star Wars VII, que lo tenemos acá:
¿Lo analizamos un poco? La película, como era de esperar, tiene una estética impecable, y se nota mucho que han decidido utilizar muy poco el CGI (aunque siempre ayuda, siempre y cuando no se note). Por otro lado, apareció un personaje faltante en los dos tráiler anteriores: Leia, que no se la veía muy bien. Por otro lado, tenemos un casi choque de sables láser (que era, justamtente, lo que faltaba). Pero lo más importante de este nuevo tráiler de Star Wars es que hubo dos grandes ausencias que favorecen mucho al hype y brindan un poco de respeto a los productores: primero, casi que no sabemos de qué se trata la película. Lo único que podemos deducir es que todo lo sucedido en la trilogía original se guardó en completo silencio y solo era un mito, a lo que Han Solo le dice: es verdad, todo lo que escuchaste. Y, por último, la ausencia principal: Luke Skywalker. No sabemos absolutamente nada del personaje, salvo que su actor Mark Hamill tuvo que dejarse la barba por contrato (¿Obi Wan?). Por esto, los rumores corren y se dice cualquier cosa, desde que Luke está entrenando Padawan desde la oscuridad, pasando por que Luke aparecerá cinco segundos al final de la película y otros que se atreven a decir que se pasó al lado oscuro de la fuerza…